Javier Gutiérrez rueda estos días en Las Palmas de Gran Canaria la película Estación Rocafort. El actor ganador de dos Goya se estrena en un género que hasta ahora no había tocado en su carrera: el terror. Lo hace a las órdenes de Luis Prieto, director de películas como Secuestrado y Shattered.
Hace más de un mes que comenzó el rodaje, según contó Gutiérrez en El Faro de Ceuta. "Me encuentro rodando una película de miedo. Me apetecía mucho, aunque confieso que es la primera vez que me adentro en este género", dijo. Ese rodaje le ha llevado a Las Palmas de Gran Canaria. Este martes, la producción se instaló en los alrededores de la plaza de la Feria. Antes habían rodado también en un establecimiento de la calle León y Castillo.
Gutiérrez es uno de los actores más galardonados del cine español en la última década. Tras hacerse un nombre con papeles televisivos en series como Los Serrano o Águila Roja, su carrera en la gran pantalla empezó a tomar impulso con su papel en La isla minima, de Alberto Rodríguez. Ese trabajo le valió un Goya al mejor actor, la concha de plata en el Festival de San Sebastián, el premio Feroz y el Fotogramas de Plata.
En 2017 volvió a ganar el Goya al mejor protagonista por su papel en El autor, de Manuel Martín Cuenca. Tambien estuvo nominado en 2018 por Campeones y en 2022 por La hija. En 2016 optó al Goya al mejor actor de reparto por El olivo.
Luis Prieto es un director madrileño con más dos décadas de experiencia en la industria. En 2002 fue premiado en el Festival de Cine de Trbeca, en Nueva York, por su corto Bamboleho, que también fue nominado al Goya y recibió una mención del jurado en Venecia. Ha desarrollado casi toda su carrera fuera de España. Ha dirigido capítulos de series como White Lines o Vampire Academy. También ha sido el director de películas commo Secuestrado, con Halle Berry, o El engaño, en la que participó John Malkovich.