Este martes ha fallecido a los 92 años en Tenerife el profesor, poeta y escultor Fernando García-Ramos (Santa Cruz de Tenerife, 1931), conocido como Fernando Garciaramos. De extensa carrera creativa, Garciaramos compaginó su creación escultural con la literaria. De la primera cuenta con piezas repartidas en colecciones particulares por todo el mundo. De la segunda publicó más de 20 poemarios y una antología poética, así como libreto de la ópera “La dama del mar”, con música de Arístides Pérez Fariña.
Pero también triunfó dentro del mundo académico. Se doctoró en Bellas Artes por la Universidad de La Laguna (ULL), fue catedrático de Dibujo Arquitectónico y estuvo adscrito al ahora extinto Departamento de Expresión Gráfica en Arquitectura, del cual llegó a ser director, así como de la entonces llamada Escuela de Arquitectura Técnica, tal y como recuerdan desde la ULL en un comunicado. El 19 de abril de 2018 la institución académica le rindió un homenaje en su Paraninfo, dentro del ciclo de Encuentro de Escritores que organizaba el centro.
Su arte en las calles
Pero las obras que más huellas han dejado son las esculturas. A lo largo de las calles Tenerife se pueden ver algunas de sus figuras, como Arborea, en Santa Cruz de Tenerife, La dama de Aguere, en La Laguna, el Monumento a Los Sabandeños, en Punta del Hidalgo o el Monumento al emigrante, en Garachico. Además se pueden ver varias piezas de pequeño y gran formato en los campus y el Rectorado de la Universidad de La Laguna y también de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
Tal y como recuerdan desde la ULL, el Museo Municipal de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife alberga una colección permanente de su obra y también pueden encontrarse ejemplares de su producción en el Florida Museum of Hispanic and Latin American Art de Miami, en la Casa-Museo José Martí de La Habana, en la Accademia Araldíca Universale «La Crisalide» de Catania (Sicilia) y en colecciones particulares en Madrid, Barcelona, Sevilla, París, Berlín, Japón, Macedonia y Lima.