El año pasado "todos fuimos digitales", según afirma el Anuario de cultura digital 2021: La Cultura ante la pandemia, documento realizado por Acción Cultural Española (AC/E) que destaca cómo el sector cultural creció digitalmente en 2020 lo que "hubiera tardado al menos cinco años".Esta es una de las conclusiones de este informe anual, un documento en el que Javier Celaya, director académico del Anuario AC/E, ha destacado a Efe que 2020 fue el año "en el que todos fuimos digitales"."Habíamos adoptado lo digital como un primo hermano, porque pensábamos que lo presencial era lo único para consumir cultura, pero la pandemia ha hecho que mucha gente descubra las bondades de lo digital", ha destacado Celaya como "principal conclusión" de este informe que analiza el impacto que Internet tiene en nuestra sociedad.Con un "punto de partida que no era malo", el sector cultural afrontó la llegada de la pandemia con una "aceleración" de esta "necesaria transformación", por lo que en un solo año se ha dado un "paso de gigante de cinco años".Así, refleja este anuario, en 2020 más de 125.000 ciudadanos se dieron de alta en las plataformas publicas de prestamos digitales disponibles (eBiblio y eLiburutegia), y durante los peores meses del confinamiento estas dos plataformas realizaron más de un millón de préstamos de contenidos digitales, lo que multiplicó por cuatro el consumo digital en comparación con el año anterior.Paralelamente, los ingresos derivados de las plataformas de suscripción de libros electrónicos, audiolibros y podcasts que operan en nuestro país como Audible, Nubico, Storytel o Podimo crecieron en España un 145% en 2020 en comparación con el año anterior.Por su parte, plataformas audiovisuales como Netflix "arrasaron" con sus objetivos de crecimiento en 2020, ya que logrando 16 millones de nuevos suscriptores, casi el doble de lo previsto. Asimismo, los usuarios de la plataforma Filmin están viendo más de 100.000 películas al día en 2021, el doble de visionados que en 2020. Y también, los ingresos de la plataforma de suscripción Amazon Prime se han incrementado en un 28%, lo que supera los 150 millones de usuarios en todo el mundo.Por último, los lectores digitales de libro electrónicos son grandes consumidores, con una media de 12,8 lecturas al año, más del doble que los índices de lectura de libros en papel que se sitúa en 9,7 libros al año, según el último estudio de la Federación de Gremios de Editores de España. Así, destaca Celaya, "todo el mundo se ha dado cuenta de que lo digital no tiene que ser parte de su estrategia, sino un eje transversal en todo lo que haga ahora"."Lo que se ha visto -añade- es que la pandemia ha hecho que mucha gente descubra estos servicios y los incorpore a su día a día y los combine con leer libros de papel o ir al teatro", matiza al tiempo que pone de manifiesto el hecho del avance en la "exportación" de la cultura española gracias a los formatos digitales.
Las cinco lecciones de la pandemia
Según concluye este anuario, tras el análisis de la reacción del sector cultural digital español, desde AC/E destacan cinco lecciones aprendidas durante el pasado año.- En primer lugar afirman que el confinamiento trajo consigo una actividad digital "sin precedentes", pero señalan que la estructura y la navegación de muchas webs del sector cultural en la actualidad "no facilita el descubrimiento ni el consumo de sus contenidos".
- La segunda lección hace referencia a que, tras comprobar que muchos usuarios "desconocían" que las entidades culturales disponían ya de una oferta digital "tan amplia", hay que comunicar "más y mejor".
- En tercer lugar, desde AC/E ven como lección el hecho de que el sector reconoce que lo digital "está para quedarse y que a partir de ahora tiene que apostar por el consumo de contenidos digitales de forma prioritaria".
- El cuarto punto apunta que "gracias a la pandemia" ya se está asumiendo que lo digital "no es un añadido opcional, sino que debe formar parte integral del quehacer de las entidades culturales en todas sus vertientes". Por eso, dicen desde esta institución que el nuevo escenario "ha venido a redimensionar lo digital, a situarlo en esa transversalidad interna que era necesaria para darle una centralidad y una magnitud ya intuidas pero hasta ahora no desarrolladas".
- Por último, concluye el anuario, lo que está cambiando son las "maneras en que creamos contenidos, los difundimos, los compartimos y los usamos, es decir, la esencia misma del concepto de obra y autoría, de propiedad intelectual, de obra original y obra derivada, es acceso y consumo de contenidos culturales".