Hay algo en las exposiciones que se tiene o no se tiene, y es la capacidad para trasladar al visitante a un estado de ánimo pasado que le reconforta y enriquece con su simple existencia. No se trata de un síndrome de Stendhal al uso, si no bien uno de Estocolmo, dado que los ojos del espectador, quizás todo su ser, se dejan atrapar por las sensaciones que esta experimentando y no ya no quiere soltar.
El pasado viernes sucedió algo parecido en la ermita de San Miguel Arcángel de La Laguna con motivo de la inauguración de la muestra Caballeros del Zodiaco: la batalla del cosmos. El antiguo santuario (dónde, si no) obró el milagro de transportar a quien cruzaba su portal a los años 80 y principios de los 90 del siglo pasado, cuando los jóvenes de todo el país corrían a ver el espacio Superguay de Miliki y Rita Irasema donde se emitía una serie que marcó a toda una generación, protagonizado por el carismático Seiya de Pegaso y sus compañeros los caballeros de bronce.
Figuras de acción
Con más de un centenar de piezas de colección, Xerach Henríquez devolvió, con sus figuras de acción coleccionadas a lo largo de los años, a muchos adultos a su niñez. Caballeros más fáciles de conseguir como los antiguos caballeros de oro, liderados por el contradictorio Saga de Géminis (esas piezas no salían de sus cajas, los muñecos eran muy débiles), y otros más difíciles como los caballeros de acero, un rara avis que se creó específicamente para la serie animada y no aparecía en el manga original.
Todas las piezas se encuentran ubicadas en soportes creados a mano a la imagen de los decorados de la serie, haciendo de su visionado un placer a la hora de recrear en la mente algunos pasajes de la serie.
La muestra, que estará abierta al público durante dos semanas, está presidida por tres piezas de auténtico lujo: reproducciones a tamaño real de la armadura de oro de Sagitario y la primera armadura de Seiya. A ellas se suma el casco del caballero del Dragón, quizás la pieza más exacta y subjetivamente más especial de las que ahí se encontraban.
Priorizar
Cuanta Henríquez a Atlántico Hoy que, si bien siempre le gustó la serie, descubrió hace unos 10 años que aun se podían coleccionar, “y me metí de lleno con ello. Ahora, ya mayor, he vuelto a conectar con la serie”.
Seguidor de Shun de Andromeda, comenta que ha “priorizado” a la hora de adquirir figuras pues son piezas de colección, en ocasiones muy caras, y hay que seleccionar. “En España hay grandes colecciones y yo no me considero muy completista, compro lo que me gusta”, teniendo en cuenta que todos los meses salen novedades “es más fácil elegir”, aunque recomienda comprar pronto. “Mejor cuando salen porque después o no se encuentran o están muy caros”.
El comisario de la exposición, Julio Vicente Artiles, fue el instigador de la muestra. Desde su posición como trabajador del Museo Elder (donde se expuso antes de leegar a Tenerife) propuso a la dirección la posibilidad de hacer una exposición sobre este serie que mezcla con soltura las culturas occidental y oriental con los mitos, la astronomía e incluso las artes marciales.
Encontrar las figuras no era un problema, ya que Xerach Henríquez es su marido, así que “conocía desde el primer momento el potencial de la exposición”, reconoce Artiles, quien se muestra muy agradecido por la gran acogida que ha tenido en Las Palmas y que esperan replicar en La Laguna: “Se ve en las caras de la gente que entra a ver la exposición. Tú el primero, la que se le puso otra vez cara de niño cuando entraste por la puerta”. Amen.