Luisa Chico

Opinión

Asociación cultural canario argentina “Perico Lino”

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Al hilo de lo compartido entre artistas canarios y argentinos, en principio a través de las redes sociales y más tarde en persona, surgió una idea que muchos consideraron descabellada, unir esfuerzos para hacer cosas juntos sin importar las distancias, así nació un grupo en Facebook que se denominaba “De costa a costa”. A él se fueron uniendo, a partir del 2015, artistas de todas las disciplinas, música, danza, pintura, literatura, etc. Sin prisa pero sin pausa el proyecto fue creciendo y consolidándose, hasta ser una realidad en este año 2018 donde ya se ha registrado, tanto en Argentina como en Gran Canaria, con el nombre “Asociación cultural canario argentina (ACCA) Perico Lino”. 

El pasado 29 de septiembre se inauguró oficialmente dicha asociación en Mar de plata, Argentina y el próximo viernes, 19 de octubre se hará lo propio en Gran Canaria.

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En las Jornadas de convivencia literaria de ACTE de primeros de este mes se realizó un hermanamiento entre las dos asociaciones en la presencia de José Lantigua y María Hernández que llenó de emoción a los asistentes al evento.

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Te estarás preguntando que tiene que ver todo lo que te cuento con mi mundo de letras, pues mucho querido hipotético lector puesto que yo formo parte de ese colectivo desde Tenerife y mis poemas se han leído ya otras veces en los actos argentinos. Este viernes tendré el gusto de leer el que hoy quiero compartir contigo en la inauguración en Canarias de ACCA. Feliz de poner mi voz a ese poema que con ilusión escribí para la asociación en su momento y que ya tuve el gusto de escuchar con acento argentino en la voz de la compañera Zoraya Ruth acompañada a la guitarra por Alberto Chahin.
Siempre adelante en mi eterno deseo de difundir cultura y apoyar en todo lo que pueda.

DE COSTA A COSTA
Cada fragmento de tierra
termina siempre en el mar,
que en su costa la acaricia
con dedos de espuma y sal.
A veces, cuando se enfada,
la golpea sin piedad,
salpica el acantilado
en la brutal tempestad.
Arrastra la blanda arena
cambiándola de lugar,
empuja las negras rocas
del océano sin par.
Más si reina la armonía
vuelven caricias certeras,
sus cambios siempre propicia
la naturaleza bella.
Yo vivo junto a esa costa
que se acaricia y pelea,
tú vives en otra costa
más lejana, igual de bella.
Sobre las aguas profundas
tendimos puentes y estelas,
que nos pudieran unir
amparados por estrellas.
Te di mi mano de amiga
tendiste la tuya presta,
se unieron nuestras culturas
y se abrazaron banderas.