Los cinco nuevos positivos dejan un acumulado de 2.353 desde que el virus llegara a Cuba a principios de marzo, según informó en su comparecencia diaria el director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap), Francisco Durán.
Los contagios del día se repartieron en tres barrios de La Habana, que se mantiene como epicentro de la pandemia en el país, si bien el número de casos diarios venía siendo de menos de cinco en promedio en la última semana.
La capital del país, el único territorio de la isla que mantiene las medidas más restrictivas para enfrentar la COVID-19, comenzará el viernes la primera fase de la desescalada que incluye, entre otras medidas, la reanudación del transporte público urbano, la apertura de restaurantes y bares con aforo limitado y el turismo solo para locales.
Los casos del jueves se detectaron entre 2.309 muestras PCR completadas la víspera, que elevan a 175.372 las pruebas de este tipo realizadas en la isla, complementadas con test rápidos procedentes en su mayoría de China.
De los cinco nuevos contagiados, cuatro son contactos de casos confirmados previamente y en uno se desconoce la fuente de infección. Uno de ellos, además, no presentaba síntomas cuando se le realizó la prueba.
En los hospitales cubanos permanecen ingresados 44 pacientes con el virus. Todos ellos evolucionan sin complicaciones.
Ayer, se registraron tres altas médicas, que elevan a 2.221 el número de pacientes completamente recuperados de la COVID-19, el 94,4 % del total de casos.