En estos términos se ha pronunciado el presidente gallego en declaraciones a Efe, después de conocer la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que condena, en el proceso por la consulta del 9N, al expresident de la Generalitat a dos años de inhabilitación para ocupar cargo público.
Preguntado por si la condena pudiera marcar un antes y un después en el proceso independentista que impulsan el Govern y los partidos que lo forman, más la CUP, Feijóo ha reconocido que no es "optimista" por cuanto todo ese proceso está "montado sobre bases falaces".
Considera, por ello, que dicha decisión judicial puede ser "una disculpa más para acrecentar el victimismo".
El "optimismo" del presidente de la Xunta para que el llamado "procès" se paralice tiene que ver con que "el Estado de derecho vaya desenmascarando y parando la mayor deslealtad" que se ha cometido en la reciente historia de la democracia, ya que Mas, cuando se celebra la consulta del 9N, era presidente autonómico y, por tanto, "el representante ordinario del Estado en esa comunidad".
En este contexto, ha citado como "antecedente" el caso del exlehendakari Juan José Ibarretxe, aunque ha reparado en una diferencia.
Según sus palabras, el exmandatario nacionalista fue "honesto" porque llevó su plan al Congreso de los Diputados, donde fue rechazado, y entonces decidió irse.
"Es lo que debe hacer un político cuando plantea una propuesta y es derrotada: hay que irse y no persistir en el error", ha sentenciado.