Santiago Negrín

Opinión

Vaya palabras feas...

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El Estado de Alarma y el Toque de Queda son palabrotas feas que suenan a Estado de Guerra. Y es verdad que estamos en guerra contra un Virus, pero el problema, en el fondo, se reduce a algo tan básico como que no sabemos ser libres y responsables a la vez. Nos encierran en casa (excepto en Canarias) de 23.00 a 06:00, y ya está la gente maquinando como monta el tenderete al mediodía, o se “jarta” a beber antes de la noche.En Canarias, como somos una tierra única, hemos escapado (de momento) de la quema. No es porque seamos más únicos que los demás. Nos lo hemos ganado. La baja incidencia acumulada de las últimas semanas, la menor del país, con 43,51 casos por 100.000 habitantes, y la insularidad, han permitido que quedemos fuera del Toque de Queda.Después del escarmiento del anterior Estado de Alarma, ahora el Gobierno de Pedro Sánchez lo ha comprendido. Mejor ponerse de perfil y delegar las decisiones complicadas en la Comunidades Autónomas. Así, lo que ocurra en cada una, será responsabilidad de cada Ejecutivo y de su presidente. Se acabaron las operaciones de rescate nacional y las restricciones impuestas desde Madrid.Imagino que en Canarias no nos han incluido porque, además de nuestra baja tasa de contagios, malo sería mostrarle al mercado turístico internacional, que nos acaba de abrir, que estamos encerrados otra vez. Imagínense, británicos y alemanes, nos levantan la cuarentena y dos días después les decimos que estamos en Estado de Alarma. Se largarían corriendo otra vez.Es verdad que la llegada de turistas nacionales se va a resentir, pero es que es temporada de invierno, tiempo de británicos y alemanes, y los números cantan: 1.7 millones visitantes peninsulares y más de 14 millones de extranjeros. Queremos mucho a los paisanos nacionales, les esperamos pronto, pero...está claro donde esta nuestro negocio ¿no? Menos mal que de ésta, decían, íbamos a salir más fuertes. A este paso, a lo mejor, cuando mi hijo acabe la carrera, puedo ir a su graduación sin mascarilla.