La EBAU y la autoexigencia: las claves para afrontar la prueba sin presión

ENTREVISTA AH| La experta en Psicología Educativa, Eva Pellicer, nos da las claves para que los estudiantes ganen confianza en estos días de exámenes de la EBAU

Guardar

Featured Image 24609
Featured Image 24609

Este miércoles arranca la decisiva EBAU. Años de estudios y una preparación especial en el último curso que dan pie a “uno de los puntos más importantes de la vida de los estudiantes hasta ese momento”. Para conocer cómo puede funcionar la mente de los chicos y chicas ante la prueba, AtlánticoHoy habla con Eva Pellicer, vicedecana del Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife y vocal del área de Psicología Educativa, Infancia y Familia, quien comparte consejos para afrontar estas fechas señaladas en el calendario para los estudiantes y señala las claves:

  • Desdramatizar la situación. "Los chicos se sienten tremendamente presionados pensando quede esta prueba depende su futuro profesional. Realmente, no es tan así. Primero, porque el índice de aprobados ronda el 96 o el 97% y, segundo, la mayor parte de los chicos y chicas cuando llegan a este punto muchas veces ni siquiera saben qué es a lo que se quieren dedicar o qué estudios quieren cursar. En el caso de los que tengan una vocación muy grande y no consiguieran obtener esa nota necesaria para ingresar, siempre hay otra vía por la que pueden acceder".
  • Apoyo de la familia. "Una de las cosas más importantes que tienen que hacer la familia es no meterle más presión. Hacerle ver que sí, que es un momento importante en la vida, pero no necesariamente tiene que ser algo que vaya a definir el resto de su trayectoria académica o profesional. La familia debe validar sus emociones y su estado de ánimo y deben de tratarlos en base a eso. Deben alentarlos diciéndoles que han llegado hasta ahí con sus propios recursos y que son capaces de enfrentarse a este tipo de situaciones. Es bueno que si han tenido a lo largo de su trayectoria académica alguna dificultad recordarles que supieron superarla y seguir avanzando".



Por otro lado, una de las afectaciones más común que sufren los estudiantes a medida se acerca el primer día de los exámenes es la ansiedad que, en mayor o menor medida según individuo, puede repercutir más o menos a la hora de realizar la prueba. Por ello, Eva Pellicer nos da pautas para gestionar esa ansiedad.

  • Descanso. "Descansar bien la noche anterior, porque el agotamiento puede hacer que tu cuerpo no esté preparado ni física ni mentalmente para la prueba".
  • Reducir la incertidumbre. "La incertidumbre es la peor condición del ser humano. Para reducirla sería recomendable que conociese el lugar, qué ruta tienes que seguir, cuál es la puerta de entrada, dónde están las aulas. Conseguir hablar con alguien que haya pasado por eso en años recientes y le cuente cómo se va a desarrollar todo".
  • Ansiedad positiva. "Ciertos niveles de ansiedad son muy buenos porque son facilitadores de rendimiento. Un nivel de ansiedad media ayuda a concentrarse más, ser más ágil, acceder a tus recuerdos y ala memoria que tienes a medio y largo plazo. Se recomienda no tomar ningún fármaco para reducir la ansiedad, pero tampoco tomar excitantes como cafés, refrescos con cafeína o bebidas energéticas, porque si este nivel medio de ansiedad se dispara, lo que conseguimos es justo el efecto contrario. Pasamos de estar ágiles, despiertos y eficaces a bloquearnos y es la típica situación de la persona que se enfrenta a la prueba y lee y no entiende nada, no recuerda nada".
  • El examen como guía. "Que lean el examen y consulten todas las dudas. Que empiecen a contestar la prueba por aquella pregunta que conoce mejor, porque una vez que empiezan a desarrollarla van ganando confianza y va a hacer que los niveles de ansiedad se vayan reduciendo, lo que les permitirá pasar a las siguientes preguntas con mayor seguridad. También cuando ha terminado el examen (antes de entregarlo) es fundamental repasarlo. Normalmente, cuando terminas el examen es como si te quitaras una losa de encima y ya eres capaz ver las cosas con más claridad al releer. Si te has olvidado de algo, si hay una idea que no reflejaste... Nuestro cerebro funciona como carpetas, conforme abres una vas enlazando las que son relacionadas con ese tema. Entonces, al leer desde la tranquilidad puede ser que encuentres otra información con la misma lectura".

"La incertidumbre es la peor condición del ser humano. Para reducirla sería recomendable que conociese el lugar, qué ruta tienes que seguir, cuál es la puerta de entrada, dónde están las aulas. Conseguir hablar con alguien que haya pasado por eso en años recientes y le cuente cómo se va a desarrollar todo"

¿Qué ocurre si no se cumplen los objetivos?
En el caso de salir frustrado tras un examen, y sobre todo si es la primera prueba, “tienes que parar, dejarlo y pensarlo cuando llegue el momento”. La vicedecana del Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife recomienda en este caso “descansar dos o tres horas o esa tarde, dependiendo del tiempo que se tenga y de la propia organización” y ya, inmediatamente después, “empezar a prepararte la siguiente prueba”.

Por otra parte, cabe la posibilidad de que el estudiante sienta que no ha cumplido con su objetivo en la puntuación final de la nota. Para no caer en el sentimiento de fracaso, Pellicer insiste en el “apoyo familiar” y en no “autocastigarse”. Una vez termina la EBAU, tienes que “darte unos días para recuperarte”, porque evidentemente “el desgaste psicológico es importante”, pero después puedes se puede empezar a barajar qué otras opciones tiene el estudiante, “como optar por carreras similares para después dar el paso a la carrera que quería o bien repetir la prueba el año siguiente”. Entonces, “no hay que tomarlo como algo castigador”.

Ya no es tanto el aprobar, sino el no llegar a la nota que era el objetivo del estudiante. En ese caso, Eva Pellicer anima a que empiece a “buscar otras alternativas y después tener tiempo para la autocompasión. No pasa nada. No hay que auflagelarse. ¿Qué le dirías a un amigo en la misma situación?, no deberías ser más estricto contigo mismo que con otras personas. La autocompasión es fundamental”.


Afrontar la ansiedad en casos concretos

Eva Pellicer señala que "lo normal es que sean capaces de afrontar los niveles de ansiedad de los exámenes, pero hay casos concretos de personas que pueden ser más vulnerables a la ansiedad si interpretan las señales del cuerpo de una manera exagerada y se autogestionan y lo pasan peor. No está de más para nadie, pero especialmente para estas personas, que acudan a algún psicólogo que le enseñen alguna técnica con la relajación relacionada con la respiración profunda, porque antes del examen puede realizarlos y, probablemente, en cuestión de un minuto y medio pueda recuperar ese nivel de ansiedad medio.