Cáritas y la Delegación del Gobierno chocan por la acogida de 10 inmigrantes

La ONG pide que se aplique el protocolo de acogida a estos inmigrantes que se quedaron "en la calle" el pasado 29 de noviembre tras cumplirse 72 horas de su llegada.

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Cáritas y la Delegación del Gobierno en Canarias han mostrado este jueves sus diferencias sobre cómo se está organizando la acogida humanitaria de los inmigrantes que están llegando a las islas, a raíz de la incidencia que han vivido diez jóvenes a los que ha dado techo la ONG católica.

Los responsables de la ONG en Las Palmas han llevado ante la sede de la Delegación del Gobierno a este grupo de jóvenes, todos varones procedentes de Costa de Marfil y Mali, para denunciar que se quedaron "en la calle" el pasado 29 de noviembre en la plaza de San Fernando de Maspalomas, tras cumplirse 72 horas de su llegada.

Según Cáritas, su organización y el párroco de la localidad han sido los únicos que se han prestado desde entonces a atenderlos, darles comida y facilitarles un lugar donde dormir y asearse.

La secretaria general de Cáritas en Las Palmas, Caya Suárez, ha hecho esta denuncia ante los periodistas a la puerta de la Delegación del Gobierno, donde ha asegurado que ha tenido que llamar varias veces a la subdelegada en la provincia, Teresa Mayans, para pedir que se aplique el protocolo de acogida a estas personas.

Suárez ha asegurado que este grupo de inmigrantes ha pernoctado estos días en inmuebles alquilados por la ONG y en su propia sede, ya que no les han autorizado a utilizar el albergue de Tunte que ha habilitado el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana para acoger a otros compatriotas africanos llegados en las últimas semanas en embarcaciones a Gran Canaria, que sí duermen allí.

Seis de los diez inmigrantes de los que se ha hecho cargo Cáritas tienen familiares en la península, por lo que aspiran a solicitar una reagrupación, mientras que uno de ellos porta un carné de refugiado, por lo que es previsible que solicite asilo en España. Los otros tres restantes son susceptibles de formar parte de un programa de integración, ha dicho Suárez.

Mientras la responsable de Cáritas exponía a los periodistas la situación de estas personas, han llegado, procedentes de la sede de la ONG, a la que habían acudido para abordar este asunto, la subdelegada Teresa Mayans junto con el diputado del PSOE Luz André Diouf. Visiblemente contrariados por la exposición pública a la que, en su opinión, ha sometido este jueves la ONG a estas personas, al trasladarlos ante la sede de la Delegación del Gobierno, Mayans ha asegurado que en unas horas Cruz Roja se hará cargo de este grupo de personas, que podrá dormir esta noche en el albergue de Tunte, al sur de la isla.

Mayans se ha mostrado sorprendida de que Cáritas se haya manifestado públicamente junto a estos inmigrantes, ya que, según ha asegurado, ha estado en contacto con la ONG en los últimos días para tratar de dar una respuesta a estas personas, unas gestiones en las que ha admitido que ha habido "disfunciones" y para las que se cuenta con "poco presupuesto".

La subdelegada del Gobierno en Las Palmas ha explicado también que los trámites para la acogida humanitaria de estas personas se han dilatado en el tiempo porque se ha tenido que hacer ver al Ministerio del Interior de que, a pesar de ser hombres jóvenes, son personas vulnerables por el hecho de haber llegado a un territorio insular.

Además de denunciar lo que considera una "instrumentalización de los inmigrantes", Mayans se ha declarado "indignada" con Cáritas de Las Palmas por llevar a estas personas a la puerta de la delegación "para exhibirlas" ante los medios de comunicadión.

"No hay derecho de que estas personas vulnerables estén siendo utilizadas, no se con qué fines, porque esto no sirve para nada, ni a la sociedad, ni les está sirviendo a ellos", ha protestado Mayans, a la que se ha unido en esta queja el diputado socialista por Las Palmas y secretario federal de Refugiados del PSOE, Luz André Diouf.

Diouf ha recalcado que "en Canarias sabemos de la realidad migratoria" y ha asegurado que "todas las organizaciones que trabajan en este ámbito siempre han tenido la cercanía de las instituciones y, sobre todo, de la Delegación del Gobierno, gobierne quien gobierne".

El parlamentario y exsecretario de Migraciones de CCOO en Canarias ha recordado que en 2006, en la llamada crisis de los cayucos, "no hubo ningún problema" cuando en las islas estuvieron acogidas, a través de protocolos, "más de 36.000 personas"."Este malentendido podía haberse solventado hablando y sentándose con la Delegación del Gobierno porque no hay necesidad de crear alarma en Canarias", ha dicho "cabreado y mosqueado".