El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha informado en la noche de este jueves que los representantes del Rastro de Santa Cruz se han comprometido, en la reunión convocada de urgencia en el Consistorio, al cumplimiento estricto de la ordenanza reguladora del mercadillo, cuyo incumplimiento se ha venido dando de forma reiterada, tal y como lo acreditan los informes policiales como de la empresa que se encarga de la gestión del espacio el en entorno del mercado Nuestra Señora de África, según explica la administración municipal en un comunicado.
No obstante, se mantiene la suspensión del Rastro para este domingo, 10 de noviembre, tras haberse firmado un decreto. Este día perdido será compensado con la apertura el viernes 6 de diciembre.
Asimismo, el ayuntamiento recuerda que el Rastro no iba a celebrarse el próximo día 17 al coincidir con la maratón en la capital, por lo que será el próximo domingo 24 de noviembre cuando se retome la celebración en su ubicación original, de forma que si los incumplimientos se mantuvieran se organizaría el traslado a otro entorno de la ciudad antes del mes de enero.
Ni una más
Según desarrolla la nota informativa de la reunión, el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, expresó con claridad que "el ayuntamiento no va a permitir nuevos incumplimientos. Los puestos deben tener su licencia visible, cada comerciante debe estar localizado en el lugar adjudicado en el mapa de localización, y cada uno de los 412 vendedores con autorización debe cumplir con las medidas de seguridad y horarios". El alcalde y el concejal, Carlos Tarife, arrancaron el compromiso de los comerciantes para que se evalúe domingo a domingo el cumplimiento de este principio de acuerdo.
Hasta Reyes
Sin embargo, una vez pasado el Día de Reyes se reubicará el Rastro en un nuevo emplazamiento que mejore las condiciones de operatividad del mismo.
Por su parte, Carlos Tarife, al que habían colocado los comerciantes en el ojo del huracán, reiteró el apoyo al Rastro, “siempre que se cumpla con las normas, pues prueba de ello es la inversión de 200.000 euros para adquirir las carpas de los comerciantes con licencia”.
Por último, según detalla el comunicado, el edil capitalino comentó que “la búsqueda de otra ubicación nos permitirá celebrar la actividad bajo los estándares de seguridad, tener un mejor control de los accesos, y cumplir con la normativa vigente”.