En la rueda de prensa de balance del año en el Palacio de la Moncloa, el jefe del Ejecutivo ha vuelto a ofrecer al futuro Govern "toda su colaboración" y su "mejor voluntad" de un diálogo "constructivo, abierto y realista" siempre que sea "dentro de la ley" para resolver los problemas de los catalanes y conseguir que Cataluña vuelva a la senda de la recuperación económica.
Rajoy ha recordado que el desafío independentista ha obligado a aplicar por vez primera el artículo 155 de la Constitución, algo que ha demostrado la "calidad de la democracia", la independencia de los poderes del Estado, el "imperio de la ley", la "utilidad de las normas" y la "serenidad" del conjunto de la sociedad.
Espero que, cuanto antes, podamos contar en Cataluña con un Govern dedicado a revertir los graves efectos económicos y sociales de la crisis de estos meses. pic.twitter.com/5m0QVz9mEP
— Mariano Rajoy Brey (@marianorajoy) 29 de diciembre de 2017
En suma, ha dicho que se ha utilizado "la ley para defender la ley y la convivencia" y ha apuntado que "lo lógico y lo razonable" sería "no volver a poner a prueba" los valores que se han defendido.
En este sentido, ha advertido de que no podrá aceptarse de nuevo "ningún chantaje, medidas de fuerza ni políticas de hechos consumados" y ha hecho ver que al igual que ocurrió tras la declaración unilateral de independencia, Europa "no concederá ningún tipo de reconocimiento o legitimidad" a quien vuelva a intentarlo.
Rivera mantendrá su apoyo a Rajoy hasta el final de esta legislatura "de transición" https://t.co/EBKJjCyXF3
— Vozpópuli (@voz_populi) 29 de diciembre de 2017
Y ha subrayado que el futuro Gobierno catalán no podrá hacer más "apelaciones a la ruptura o la ilegalidad" dado que la ley "no lo permitirá", y además ha explicado que los independentistas carecen del apoyo mayoritario de la sociedad catalana "para mantenerse en esa deriva tan perniciosa".
Confiado en que se pueda abrir una etapa en Cataluña "basada en el diálogo y no en el enfrentamiento", Mariano Rajoy ha recordado que el procés ha llevado a un "grave deterioro económico" a esta comunidad autónoma, solo mitigado en parte por la aplicación del artículo 155, como ha puesto de relieve el Banco de España.