Los ocho retos del nuevo Gobierno de coalición

El Ejecutivo se ha puesto de plazo tres meses para aprobar los Presupuestos Generales del Estado, pero el primer Consejo de Ministros tendrá que abordar las iniciativas congeladas.

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El candidato socialista, Pedro Sánchez, se convierte en el presidente del Gobierno con el margen parlamentario más corto registrado en la historia de la democracia: dos votos. Fue un total de 167 síes, frente a 165 noes, los que permitieron que Sánchez fuera investido.

A partir de este miércoles 8 de enero de 2020 arranca una agenda intensa para la nueva etapa política donde Canarias está muy pendiente de ver materializadas los acuerdos suscritos con Sánchez sobre los compromisos del Régimen Económico y Fiscal (REF), el Estatuto, las carreteras, entre otros.

Sin duda, el primer reto vital para el conjunto del Estado es garantizar los votos para que salga adelante los Presupuestos Generales de 2020.

Las nuevas cuentas públicas necesitan establecer el límite de gasto no financiero o techo de gasto para 2020, además de los objetivos de déficit y deuda pública para los próximos años, que tendrán que ser votados en las Cortes.

Elevar el salario mínimo y actualizar las pensiones, la mesa de gobiernos entre Estado y Generalitat para abordar el conflicto catalán son algunos de los primeros retos anunciados por el gobierno de coalición.

A continuación la hoja de ruta:

(1) Aprobar los Presupuestos Generales del Estado

El nuevo Ejecutivo se ha puesto de plazo tres meses para aprobar los Presupuestos Generales del Estado, pero el primer Consejo de Ministros tendrá que dar cuenta de varias iniciativas económicas que quedaron congeladas a finales de diciembre a la espera de que se conformara el nuevo Gobierno.

(2) Mesa de gobiernos: Estado y Cataluña

Respecto a Cataluña, el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió a que en un plazo máximo de quince días tras la formación del nuevo Ejecutivo se crearía la prometida mesa de gobiernos para debatir la situación en Cataluña.
Así consta en el pacto entre PSOE y ERC, por el que la formación independentista se abstuvo en la investidura de Sánchez, y que también acordó someter a consulta en Cataluña los acuerdos a los que pudieran llegar.

(3) La subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y (4) actualizar las pensiones

Pero además de esta medida, el Gobierno tiene pendiente aprobar la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que quiere negociar con los agentes sociales y actualizar las pensiones el 0,9 por ciento este año. Además, deberá incrementar las nóminas de los funcionarios en torno al 2 por ciento.

(5) La reforma de la financiación autonómica

En paralelo, el nuevo Gobierno de coalición deberá poner en marcha la reforma de la financiación autonómica, otro compromiso en el que tiene que implicar a todas las comunidades y que deberá tomar forma en los próximos meses.

(6) La derogación de la reforma laboral del PP

Otro asunto prioritario para el Gobierno, y así lo recogió en el acuerdo para una coalición progresista, es la derogación de la reforma laboral del PP, la recuperación de derechos laborales y sociales "arrebatados" por los populares.

(7) La agenda social: las subidas abusivas alquiler, pobreza energética y copagos sanitarios

Además, en las próximas semanas el Gobierno de coalición deberá impulsar la agenda social prometida en la que se incluye una de las reivindicaciones más emblemáticas de Unidas Podemos como es frenar la subidas abusivas del alquiler y dar potestad a los ayuntamientos y comunidades para que regulen estos incrementos en caso de producirse.

El Gobierno también deberá materializar la protección al cien por cien a las familias vulnerables en situación de pobreza energética y proceder a la eliminación progresiva de los copagos sanitarios introducidos en 2012.

(8) Incremento de recursos para educación y becas 

El nuevo Ejecutivo incrementará los recursos públicos para la educación y becas, garantizará la gratuidad real y efectiva de la educación obligatoria la asignatura de religión será de carácter voluntario sin que haya asignatura alternativa y la nota no computará a efectos académicos y se regularán los juegos de azar para prevenir y frenar la ludopatía.