A base de Mordisquitos

En sólo medio año, los bubble waffles han causado sensación en El Médano

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De Oreo, de Ferrero, de Bounty, Tropical; con helado de menta, yogurt, fresa, vainilla, chicle, mango, coco; con Mars, Kitkat, Kinder Bueno, Maltesers; con sirope de nutella, frutos rojos, cerezas, caramelo, chocolate crujiente… ¿Imaginas cuántas combinaciones son posibles con algunos de estos ingredientes? ¿Lo imaginas dentro de un gofre? Esta combinación de ingredientes es lo que causa sensación en El Médano, en Café Mordisquitos.


Desde Hong Kong a Londres, de Londres a Madrid y de Madrid a Tenerife. Esos son los pasos principales que han dado los bublle waffles, una especie de helado combinado con golosinas dentro de un gofre. Esas combinaciones se cruzaron en el camino de Nazaret Rivas y Sergio Núñez, una pareja de emprendedores que en apenas seis meses han colpasado la Calle Villa de la Orotava, en el pueblo pesquero de El Médano (Granadilla de Abona).


Su pequeño local no da respiro. Desde que abre a las 3 de la tarde llegan las primeras peticiones: “Nos ha sorprendido muchísimo la respuesta de los clientes”, dijo Nazaret Rivas, propietaria de Mordisquitos Café, quien reconoció que “desde el 1 de enero nos dimos cuenta de que algo no era normal. Sólo llevábamos dos semanas de apertura y se formó una cola inmensa”.


La historia de Mordisquitos Café se remonta unos años atrás cuando Narazet y Sergio se cruzaron con los bublle waffles en uno de sus viajesa Londres: “Nos gustó muchísimo la idea y consideramos montar un local en Tenerife. Y así hicimos… Queríamos empezar por algo pequeño, no haciendo una inversión muy grande y estamos muy contentos con la respuesta que ha tenido”, explicó Nazaret.


El secreto de sus bubble waffles está en el gofre, que “tiene más cantidad de huevo. Esto lo hace mas ligero y está gustando más al cliente”, comentó. Otro de los méritos es tener sus propias recetas: “son creaciones nuestras, que hemos trabajado durante mucho tiempo, a conciencia, buscando la sintonía entre los sabores de la fruta. Y siempre estamos buscando la manera de mejorar”, comentó.


Actualmente, Modisquitos Café cuenta con una amplia variedad de helados Carte d’Or, pero no descartan la elaboración propia en el futuro: “estamos muy contentos con el producto que tenemos. El helado artesanal tiene un coste elevadísimo, sobre todo la maquinaria, y ahora no es viable”, argumentó Nazaret Rivas, quien sí admitió que el local sirve un helado casero de gofio.


El éxito explosivo de este establecimiento han obligado a sus propietarios a reforzar su plantilla: “llega el verano y creemos que aumentará la demanda. Era necesario incorporar a algunos empleados para que no decaiga el servicio y que el producto salga con fluidez. Pensábamos que estar en segunda línea y contar con unas grandes heladerías en El Médano sería más complicado, pero ha sido un éxito”, dijo Nazaret Rivas.


Y no sólo es el producto, también es el servicio. Sólo basta con permanecer cinco minutos bajo el mostrador para darte cuenta de que la cara de felicidad con la que salen los clientes del Mordisquitos Café no tiene precio…