Los resultados corresponden al informe de calidad del aire relativo a 2018 en el que se muestra una mejora con respecto a 2017 y se concluye que durante todo el año pasado ningún contaminante superó los límites legales establecidos en la normativa para evitar, prevenir o reducir los efectos nocivos para la salud humana y en el medio ambiente en su conjunto.
Entre las mejoras detectadas en comparación con 2017 destaca una disminución notable en el número de superaciones del valor límite diario de partículas PM10, partículas de menos de 1 milímetro dispersas en la atmósfera y formadas por compuestos inorgánicos, debido en parte a que durante 2018 la incidencia de los episodios de intrusiones saharianas ha sido inferior al año anterior, con un menor número de días de calima declarados que el año anterior.
Todas ellas cuentan con los medios necesarios para aportar una alta fiabilidad a los valores registrados, cumpliendo en todo momento los requisitos establecidos en la normativa vigente sobre trazabilidad de los datos y garantía de calidad.