La subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, ha dicho a los periodistas que el dispositivo de rescate trabaja desde ayer "sin descanso" y que el trabajo es "técnicamente muy complicado", por lo que se analizan "todas las alternativas posibles para acceder, localizar y rescatar" al pequeño.
Tras caerse en el pozo, la familia del niño le escuchó llorar, pero ahora dicen que no se oye nada. Los trabajos de rescate continuarán pese a que ya es noche cerrada https://t.co/GtynNNPQKd …
— EL PAÍS (@el_pais) 13 de enero de 2019
En las últimas horas, los efectivos han hallado una bolsa de chucherías y también han extraído un vaso del pozo, de unos 25 centímetros de diámetro y 110 metros de profundidad, aunque por ahora no se ha obtenido ninguna imagen que constate la presencia del niño.
"Nadie está preparado exactamente para un rescate en estas condiciones", ha señalado Gámez, quien ha explicado que no se trata solo de llegar hasta el fondo del pozo sino de "conservar el hueco por donde se debe rescatar", por lo que no se desecha ninguna alternativa.
La información que disponen los servicios de emergencia de que el menor cayó sobre las 14.00 horas de ayer en este pozo fue facilitada por la propia familia, que también aseguró que escuchó unos lloros.