"En España supone un problema la imposibilidad de rescatar de forma parcial a los trabajadores"

CHARLAS SOBRE TURISMO EN EL VILLA CORTÉS (III)| Axel Frj. Gassman valora la apertura de los hoteles canarios, así como las medidas de los gobiernos para el turismo

Guardar

Featured Image 37475
Featured Image 37475

Tras hacer una primera valoración sobre el caos que ha generado la pandemia del coronavirus en las dos primeras partes de la entrevista con Axel Frj. Gassman, presidente del grupo hotelero Europe Hotels International, en esta ocasión, nos centramos en los hoteles localizados en Canarias y cómo viven de cara a la próxima apertura.

En la primera parte del serial, Axel Frj. Gassman hacía hincapié en que no se debía "pensar en salvar la temporada de verano", mientras que en la continuación, renegaba de que la responsabilidad del control sanitario recayera en los hoteleros. Ahora, una vez reflexionado a ese respecto, el propietario del hotel Europe Villa Cortés, donde se realizó la amenizada conversación, da fechas para empezar a ver a los grandes hoteles del archipiélago con las puertas abiertas, así como analiza las medidas que el Gobierno regional y el estatal han ido tomando pensando en el sector turístico.





¿Qué fechas de aperturas tienen planificadas para sus hoteles canarios? Me comentaba que no será antes de dos o tres meses.
"La idea es la segunda quincena de octubre, barajamos las fechas del 21 y 29 para los hoteles de Tenerife; son las fecha que tenemos previstas".

Algunos hoteles en Canarias han anunciado que abrirán próximamente sus puertas a los clientes; son los casos de Abama, Bahía del Duque, los hoteles de la cadena BlueBay, Iberostar, NH, Barceló entre otros. ¿No cree que el hecho de abrir en estas condiciones suponga incrementar las pérdidas para los hoteles?
"Estoy convencido. En meses junio, julio y agosto el hotel abierto pierde más en su cuenta de explotación que cerrado. Yo no tengo claro qué clientes van a venir. Lo que es seguro es que vendrán muy pocos.

Hemos hecho un cálculo, si nosotros aplicamos los protocolos con el nivel de exigencia actual, para atender un 30 o 40 por ciento de ocupación necesitamos casi la plantilla completa. Esto supone un coste añadido muy alto y hay que estudiarlo muy bien. Prefiero planificar la apertura para la temporada de invierno y dar ésta de verano por perdida. Nuestro factor competitivo de cara a invierno es que contamos con clientes muy fieles, clientes de muchos años que siempre repiten con nosotros.

Por supuesto, todo esto que le comento depende del la situación de los ERTES y de su prórroga, cuestión que se encuentra aún en negociaciones".





¿En qué medida cree que debería apoyar el gobierno español al sector turístico, el más relevante para nuestro país, con medidas como la mencionada prórroga de ERTES entre otras medidas? Su prórroga hasta diciembre sería sin duda una ayuda, pero, ¿y después de diciembre de este año?

En muchos países en Europa han autorizado el ERTE para los próximos dos años. Existe una diferencia en las condiciones del ERTE en el resto de Europa, pudiendo incorporar el personal parcialmente.

Me preocupa la situación actual del ERTE en España y la falta de acuerdo. A estas alturas no está claro en qué forma vamos a prolongar. Sin conocer aún las medidas de la extensión del ERTE me pregunto cómo los hoteleros podemos planificar nuestras plantillas con la incertidumbre que nos supone la falta de acuerdo, más allá del día 30 de junio.  

En España es muy importante que se pueda llegar a un acuerdo que posibiliteel rescatar de forma parcial de los trabajadores afectados por el ERTE. Muchos hoteles podrían acogerse a esa opción, liberando así al estado de asumir esa carga laboral durante ese tiempo.Al gobierno el hecho de contemplar el rescate parcial le interesaría porque durante el tiempo del rescate parcial quedaría exonerado de asumir el coste del ERTE de las personas rescatadas. 

Existe una diferencia que hay que destacar cuando analizamos la situación en Baleares y Canarias. Mientras que en Baleares cuentan con la figura de personal fijo discontinuo con un peso de un 90% sobre el total de plantilla, en Canarias carecemos de esa figura, que sería un elemento que, por un lado garantizaría el empleo, manteniendo sus derechos laborales de cara a la temporaday por otro permitiría al hotel adaptarse a su situación en función a la temporalidad. Sin esa figura la alternativa ante una disminución de ventas como la actual es inexistente, y más si no contamos con medidas de flexibilización del ERTE, medidas que en Alemania supone una extensión del expediente por un período de dos años y no como aquí.   

Hay que tener en cuenta que los hoteleros contamos con muchas familias que dependen de nosotros y, por supuesto, nos sentimos responsables de ellos y de sus familias. Hablamos en mi caso de de 240 personas y sus familias. Como hotelero, me siento responsable de todos y cada uno de ellos. Ya el sufrimiento es mucho y no quiero que sufran por nada si está a mi alcance. Por eso la prolongación de los ERTE es fundamental e incluso no sólo hasta Navidad sino un año como en el resto Europa, con la posibilidad de poder realizar rescates parciales". 

Esa es la realidad de Canarias, debemos mantener la empleabilidad los 6 meses siguientes a la finalización del ERTE y no contamos con medidas que ayuden, desde el punto de vista del empleo a adaptar nuestros recursos a una realidad de disminución drástica de ventas como la que vivimos. Por tanto es necesario flexibilizar la carga social con medidas flexibles de ERTE, en plazo temporal y en forma de aplicación, además de aplicar políticas laborales que permitan la figura contractual balear del fijo discontinuo. Seamos claros, las zonas turísticas de las islas no cuentan hasta la fecha con turistas. Yo quiero recuperar a mi gente lo antes posible pero es impensable hacerlo en estas condiciones. Contamos en temporada de invierno con un nivel de reservas muy inferior al mismo período del año pasado. Esto unido a la incertidumbre que genera el mercado inglés supone un escenario sin precedentes.

¿Cómo valora hasta ahora las medidas que han adoptado tanto a nivel del Gobierno de Canarias como a nivel español en cuanto a este proceso en el que estamos de escalada y de nueva normalidad?

"Al principio fue dubitativo sin saber muy bien que pretendía el gobierno pero ahora a nivel general se ha cogido un buen ritmo. A nivel Canarias se está luchando para defender su territorio, enclave único, y el turismo, que supone de forma directa un 40% del PIB. Lo veo muy positivo.

Creo que las últimas cuatro o seis semanas han actuado bien, aunque sí veo que las medidas son cortoplacistas, a dos o tres semanas vista. Deberían, como en el caso de los ERTES planificar a un año vista flexibilizando con medidas de rescate parcial para que las empresas y los empresarios puedan tomar de forma más tranquila y planificadas sus decisiones. Medidas de esta índole facilitan al hotelero su decisión de apertura y así no esperar hasta final de año. Si las medidas se mantienen más allá de Diciembre, el hotelero podría probar y abrir sus hoteles para comprobar si pueden mantenerse abiertos y en caso contrario poder cerrar y devolver nuevamente a los trabajadores al ERTE. Con este tipo de medidas incluso en mi caso me he llegado a plantear no abrir hasta el 21 Diciembre, ya que la decisión no tiene vuelta atrás.

Facilitaría la toma de decisiones si pudiéramos devolver a la gente al ERTE en caso de que la apertura prematura de los hoteles no nos diera una viabilidad mínima económica".