Grupo Romeu, con sede central en Barcelona y Valencia, ha creado una nueva consignataria para potenciar el servicio a los buques que el holding empresarial catalán presta en el Puerto de La Luz y de Las Palmas. Se trata de Ocean Ports & Shipping (OPS), una compañía que nace con vocación internacional para reforzar la asistencia a los barcos y pelear por nuevos mercados desde Canarias.
OPS opera de la mano de Romeu Shipping Agency, matriz responsable de la consignación de los buques del grupo, que en 2020 cambió su imagen corporativa y amplió su cartera de clientes más allá de los barcos, posicionándose como una de las compañías líderes en logística del mercado nacional, con clientes tan potentes como la naviera Evergreen, que está especializada en el transporte mundial de contenedores, entre otras actividades.
La mayor parte del nuevo equipo de OPS procede del Transcoma Shipping, entre ellos Juan Carlos Núñez, que dirigió Hamilton entre 2018 y 2023, empresa canaria vinculada a Transcoma.
Objetivos para crecer
Núñez, junto a otros dos altos cargos de OPS, ejerce de director de la consignataria, que aspira a captar nuevos clientes en los segmentos de buques tramp (sin escalas predeterminadas ni horarios establecidos), mercancía general (estiba) y los cruceros. También en servicios logísticos, con el Norte y Oeste de África como principales mercados a los que llegar desde Las Palmas, aunque sin olvidar el brazo internacional de Romeu.
Los orígenes de Romeu se remontan a 1869 en Tarragona, consignando barcos con destino a Holanda, el Reino Unido, Suecia y Francia, además de mandar naves con sal a Baleares. La empresa familiar va por su quinta generación de gestores, con una importante expansión nacional en la década de los ochenta y otra de naturaleza internacional en los noventa. Hoy están presentes en 24 países de 4 continentes, por lo que llegan con sus servicios a casi todas las partes del mundo.
Desde Santa Cruz y Las Palmas
En Canarias operan en los puertos de Santa Cruz de Tenerife y de Las Palmas, con firmas como Tiba Internacional, especializada en transporte, logística para todo tipo de sectores, aduanas y carga de proyectos, además de Canarship, una agencia marítima que tiene un peso importante en en la industria del gas y del petróleo, con clientes de la talla de Valaris, entre otras compañías perforadoras habituales del Puerto de La Luz.
A esas dos empresas, Tiba Internacional y Canarship, se suma ahora la consignatria OPS que dirige Nuñez. Solo Canarship dispone de 4.000 metros cuadrados en el Puerto de Las Palmas para almacenar repuestos y mercancías, con las figuras aduaneras correspondientes para manipular este tipo de bienes. En Santa Cruz de Tenerife, además, Grupo Romeo gestiona el Punto de Inpección Fronterizo (PIF) del puerto.
Más competencia
También ha obtenido permiso para trabajar en La Luz la agencia Bacomar, que da el salto a la provincia de Las Palmas desde los puertos de Algeciras, Gibraltar y Ceuta. Ofrece todos los servicios clásicos de una consignataria, como cambio de tripulaciones, logística, suministro de provisiones y demás necesidades habituales de los barcos, siendo su fuerte el avituallamiento de combustible. De ahí que su sede esté en Algeciras, líder nacional en bunkering y principal competidor de La Luz en la venta de hidrocarburos.
Sara Piñatel, responsable de Bacomar en Las Palmas, explica que han decidido abrir oficina en la capital grancanaria para prestar los servicios de manera directa, no mediante subcontrataciones, que era lo habitual antes. Su apuesta por La Luz coincide con el buen momento que atraviesa el puerto en bunkering, con un aumento de casi el 30 % en suministro de combustible con respecto al año pasado. Los barcos derivados del Mar Rojo, que paran en Canarias para repostar, son la causa de este crecimiento.
En La Luz operan 61 consignatarias, según el registro oficial de la Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP), la mayoría vinculadas a la Asociación de Consignatarios y Estibadores de Buques de la provincia de Las Palmas (Asocelpa). Estas empresas son necesarias porque la ley obliga a contratar a un representane local cada vez que un barco llega a puerto. De ahí la gran competencia que hay entre ellas.