Durante 30 días desde este martes estarán sometidos a información pública las dos plantas de hidrógeno verde que la empresa Disa está impulsando en Canarias. Lo hace a través de dos filiales en las dos islas capitalinas, en el polígono de Granadilla en Tenerife y en el polígono de Las Salinetas en Gran Canaria.
Se trata de dos construcciones similares centradas en la producción de hidrógeno verde, un vector energético usado para el almacenamiento de energía. Actualmente están sometidos a información pública los expedientes de autorización ambiental integrada, los proyectos y los estudios de impacto ambiental de las instalaciones. De esta forma, las personas interesadas ya pueden presentar alegaciones al respecto.
Las primeras plantas
Las dos construcciones estarán ubicadas en parcelas de propiedad de la empresa DISA, aunque son impulsadas por dos sociedades independientes de la energética: Hidrógeno Renovable Gran Canaria S.L. e Hidrógeno Renovable Tenerife S.L. Según indican los documentos “el destino del hidrógeno generado en la planta de hidrógeno de Granadilla, será pilas de combustible esencialmente empleadas en movilidad”.
Las construcciones están compuestas de un sistema de generación, con un electrolizador (la construcción para la generación del hidrógeno), el sistema de compresión y expedición de hidrógeno (para almacenar el hidrógeno generado por el electrolizador) y los sistemas auxiliares.
Afección a una especie en peligro
En el caso de Tenerife, la planta se situará en una zona, que como indica la Autorización Ambiental Integrada, afecta a terrenos donde se ha localizado pimelia canariensis, un escarabajo catalogado en peligro de extinción.
Por ello ya establece una serie de medidas correctoras como la localización de los ejemplares y su puesta en conocimiento del órgano ambiental, la limitación de la velocidad en la parcela, así como “se extremarán las medidas preventivas en todas las zonas de actuación, destinadas a minimizar las posibles molestias a las especies de fauna presentes”.
En el caso de la planta de hidrógeno de Gran Canarias no se han detectado afecciones relevantes a la fauna y flora al estar en un espacio más antropizado que en el caso de Tenerife.
La producción
Según los documentos, para la isla de Tenerife se estima que en una primera fase de la producción se generen 436 toneladas al año de hidrógeno y en una segunda fase alcancen las 742 toneladas. Por su lado, en Gran Canaria se alcanzarán las 296 toneladas de hidrógeno al año. La construcción estaría en funcionamiento las 24 horas durante 338 días al año.
Los equipos serán diseñados para tener una vida útil de 20 años, según los documentos, “aunque se prevé la sustitución de algunos componentes puntuales en ese periodo”. Se estima que para la puesta en funcionamiento de la planta se necesitan cuatro trabajadores.