El Joventut de Badalona se impuso por 100-68 al CB Canarias en un partido en el que el equipo catalán ahogó con su defensa la creación de juego de los de Vidorreta y, además, disfrutó de una tarde dulce en todas las facetas del ataque. Con esta victoria la Penya toma ventaja en esta serie de cuartos de final al mejor de tres partidos y obliga al CB Canarias a vencer en el encuentro de este domingo a las 12.00 (hora canaria) en el Santiago Martín. Si los aurinegros empatan la eliminatoria en Tenerife este fin de semana, el partido decisivo volverá a disputarse en el Olímpico de Badalona por el factor cancha favorable al Joventut.
Pronta distancia
Los locales salieron a la pista con una marcha más que el CB Canarias, desplegando una defensa feroz que les valió para distanciarse pronto con un parcial de 8-2 después de un 'alley-oop' de Derek Willis, con asistencia de Joel Parra, que levantó a los 9.000 aficionados del Olímpico de Badalona. El tiempo muerto solicitado por Vidorreta no tuvo efecto y, de vuelta a la cancha, dos triples de Andrés Feliz y uno de Parra agravaron la herida del conjunto tinerfeño. Solo un triple de Marcelinho, ahogado por la defensa del Joventut, llevó algo de esperanza en la reacción pero, en el tramo final del primer cuarto, Ferran Bassas le replicó también desde el perímetro. El marcador de 27-7, tras los primeros diez minutos, ya presagiaba una tarde complicada para los tinerfeños.
El inicio del segundo cuarto insufló aún mas ánimo a la Penya, que comenzó con un tapón de Simon Birgander a Joan Sastre y una transición rápida que el propio pivot sueco culminó tras una asistencia magistral de Bassas. A continuación comenzó el festival verdinegro desde la larga distancia, con dos triples de Guillem Vives, dos de Abert Ventura, uno de Bassas y otro de Willis. El conjunto canarista buscó mantenerse a flote con la anotación de tres puntos de Doornekamp, Sulejmanovic y Fitipaldo pero, a pesar de ello, el desacierto predominó en el tiro y la presión asfixiante del equipo catalán logró ampliar la ventaja antes del intermedio hasta los 33 puntos, con un marcador de 54-21.
Estrecha vigilancia
En la reanudación el Joventut continuó con su guión, con Parra sumando de manera consecutiva y un Canarias que luchaba por volver al partido con los triples de Doornekamp. El canadiense sumó dos en el cuarto pero una anotación baja en la pintura, con Shermadini constantemente bajo estrecha vigilancia, condenó lo intentos de reacción de los aurinegros. La grada del Olímpico buscó desquiciar al pivot georgiano del Canarias cantándole con sorna '¡MVP, MVP!' durante un lanzamiento de tiro libre. Dolido por el contundente marcador, el aurinegro cayó en la provocación y emplazó a la afición catalana al tercer partido de la serie, previsto en este mismo escenario. Aunque en el tercer cuarto el parcial fue de 24-22 para el Joventut, el global de 78-43 aún reflejaba la amplia renta de la primera mitad.
Sin posibilidad de remontada, en el último cuarto el CB Canarias buscó restituir su autoestima de cara al compromiso del domingo en el Santiago Martín. Era tarde para corregir los errores del partido pero pronto para bajar los brazos en una eliminatoria a la que como mínimo le resta un partido más. Con la relajación defensiva del Joventut, el equipo tinerfeño logró al menos salvar el parcial del último cuarto con un 22-25 fundamentado en la anotación de Guerra, Wiltjer y Sulejmanovic. Aún así, Pep Busquets logró sumar siete puntos en los últimos minutos y, después de un triple de Ventura, cerró el marcador colgándose del aro para poner el definitivo 100-68.