Según la Sociedad Española de Oftalmología (SEO) los síntomas que se derivan de permanecer con la vista fijada, en la mayoría de ocasiones son consecuencias de la falta de parpadeo. “La naturaleza de trabajar frente a pantallas requiere una concentración y atención especiales, por lo que, inconscientemente, la media de parpadeos por minuto baja considerablemente si lo comparamos con la media tomada en otras actividades que no requieren fijación visual”, informan. La falta de parpadeo se traduce en la sequedad de ojos, irritación y fatiga visual, patología como Enfermedad de Ojo Seco, según informa la SEO.
Dedicar menos tiempo a las pantallas es el consejo básico para evitar los daños en la vista, pero en muchas ocasiones es inevitable a causa del trabajo, que suele implicar el uso de ordenadores. El Instituto Oftalmológico Fernández-Vega destaca que la iluminación es fundamental para la salud de los ojos y aconseja que hay que “regular la intensidad lumínica del dispositivo, pero con eso solo no es suficiente: la sala en la que estemos desarrollando la actividad frente a la pantalla del dispositivo, también debe contar con la iluminación adecuada”. “Para mejorar el contraste se recomienda que la luz ambiente sea más baja que la del dispositivo”, destacan.
Para contrarrestar los efectos de la Enfermedad de Ojo Seco aconsejan desde el Fernández-Vega parpadear a menudo, ya que no solo las pantallas contribuyen a la sequedad ocular sino también el aire acondicionado, y es que el parpadeo es una manera natural de hidratación. A parte de este consejo también destacan que “otra forma de liberar a nuestros ojos de los efectos nocivos de la radiación electrónica es, aproximadamente cada media hora, apartar nuestra mirada de la pantalla y mirar al infinito durante unos segundos”. De esta forma, se obligará a la vista a descansar y evitar el contacto constante con la pantalla.