Biopompas, el negocio sostenible que ha llegado para quedarse

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Una de las características negativas principales del siglo XXI ha sido el problema de la sostenibilidad. El cambio climático ya está aquí y el ser humano, en general, poco se ha esforzado para evitarlo. Sin embargo, este gran problema ha provocado algo muy importante y esperemos que aún no sea tarde: la concienciación. Y esto lo confirma Biopompas.Cada vez hay más personas que ha cambiado el chip, personas que se han propuesto poner su grano de arena para ayudar de alguna manera a luchar contra esta enfermedad que afecta a la naturaleza y a todo lo que se encuentra en el planeta Tierra. Es el caso de esta franquicia ecológica, Biopompas, que ha aterrizado en Canarias de la mano de Airam González y Marta Marqués.Localizada en el Puerto de la Cruz, Tenerife, Biopompas es una tienda sostenible que invita a la ciudadanía de las Islas a practicar el consumo responsable con el medioambiente. Cuenta con dos líneas de productos diferenciadas. Una, de jabones a granel, tanto de higiene personal como de limpieza en el hogar y, por otro lado, objetos de uso cotidiano elaborados con criterios sostenibles, sin plástico y de residuo cero.

Idea del negocio

"Cuando vivíamos en Barcelona empezamos a tener la necesidad de reducir la cantidad de envases que generábamos en casa. Teniendo una familia de cuatro al cabo de la semana generábamos un montón de residuos, sobre todo envases.  Paralelamente, surgió la posibilidad de venir a vivir aquí. Juntando estas dos casuísticas decidimos, no solamente trabajar en casa a pequeña escala intentando reducir al máximo lo que generábamos como familia, sino también aportar a la demás gente que quisiera también reducir una oportunidad de comprar a granel esos productos que normalmente no tenemos opción de hacerlo si no es envasados en plástico: Jabones de lavadora, suavizantes, champús, geles de cuerpo, higienizan tés para el suelo… Decidimos encaminar nuestra tienda a dar esta oportunidad de comprar a granel, pero por otro lado hay otra sección que son productos de la vida cotidiana como pajitas, envuelve bocadillos, esponjas y otros elementos que generalmente tienen plástico, también lo ofrecemos a los clientes sin plástico. La filosofía del negocio es reducir al máximo o ayudar a que los clientes puedan comprar reduciendo al máximo la generación de residuos".

El cliente, protagonista

"La idea es que un cliente habitual tenga su botella de jabón y la traiga al local y la rellenamos con el jabón que desee. Si es la primera vez que viene, también tenemos, pero la idea es no generar. Por lo tanto, que cada cual traiga un envase en el que podamos rellenarle el producto que interese".

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Por qué jabones y más artículos de higiene

"La verdad es que cerca de donde vivíamos en Barcelona había un montón de tiendas de comida a granel, pero de jabones a granel uno, que era de Biopompas. Nos gustó muchísimo la idea. Como paralelamente surgió la oportunidad de venir a vivir aquí, nos dimos cuenta que en la isla estaban surgiendo muchas iniciativas, porque hay mucha preocupación por el tema de los plásticos, de alimentación a granel. Nos dimos cuenta que la parte de jabón e higiene no había mucha oferta. Por eso nos gustó empezar este negocio".

Proceso de los productos

"Los jabones, que en su mayor parte son líquidos, vienen envasados en unas bolsas que vienen en una caja de 15 litros. El porcentaje de plástico que utilizamos para envasar esos 15 kilos de jabón es mínimo en comparación con el plástico para envasar cada litro o para envasarlo en bidones, que es un plástico más grueso y de mucha más cantidad. Desde fábrica se envasa y llegan directamente. Cuando el cliente llega con la botella se lo rellenamos con un grifo que tenemos preparado".

El precio de lo ecológico

"Lo pensamos. En general, los jabones que tenemos a granel tienen un precio muy muy muy asequible. Te diría que en algunos casos más económicos que jabones que puedas encontrar en el supermercado. Por otro lado, hay una gama de productos sólidos, que además vienen sin envase, como barras de jabón o pasta de dientes en envases de cristal. Pueden parecer más caras que una opción tradicional envasada en plástico, pero a la larga su durabilidad es mucho mayor y compensa la inversión inicial.

Concienciación de la sociedad con la sostenibilidad

"Hay una necesidad muy importante de hacer cambios. Desde nuestro punto de vista, la sociedad está yendo un poco lenta. Lo que pasa es que está habiendo iniciativas y lo único que nos queda es ser optimista, aportar nuestro granito de arena, nuestro día a día como familia y con nuestro negocio un poco con el boca a boca y hablando con los amigos y familia… Es lo que nos queda. La sociedad está yendo despacio y la emergencia climática es real e importante. Es un tema que llegará y de momento nos toca hacer lo que podemos en la medida de lo posible. Cada uno podemos hacer hasta donde podemos y en nuestro caso ha sido montar nuestro negocio".

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Apertura en la era de la Covid-19

"La idea del negocio empezó antes de la pandemia. Nos ha venido todo muy de golpe. Cuando empezamos a plantear el negocio, venir a vivir aquí, no se hablaba de la pandemia, no existía. Era sobre octubre o noviembre y empezamos a gestionarlo todo. Cuando se establece el estado de alarma estábamos justo en mitad de los tramites. Evidentemente, se nos ha retrasado todo un poquito. Nos hacía ilusión hacer una inauguración de la tienda e invitar a la familia y amigos. Hacerla en el mes de julio para hacerla coincidir con el reto de Julio sin plástico. No ha podido ser, se nos ha retrasado un poco, hemos terminado abriendo en agosto que es un mes un poco malo para abrir un negocio y tampoco hemos podido hacer una inauguración en sí, porque claro, el aforo es limitado, el local es chiquitito… Simplemente hemos ido avanzando".

Primeras semanas

"Estamos supercontentos porque hay interés. Habíamos lanzado la idea en redes. Tenemos un Instagram y había unas cuantas personas interesadas preguntando cuando abríamos. En las primeras semanas ha ido viniendo gente, vecinos que ya tenían preparados sus botes, familia, amigos. Lo que nos ha gustado es que empieza a haber clientela de la zona y vecinos".